¿ Qué hacer con los niños rebeldes o desobedientes?
Normalmente estos niños suelen tener un temperamento fuerte, buscan un enfrentamiento, son desafiantes, buscan llamadas de atención y la mayoría de las veces suelen conseguirlo.
Algunas pautas son:
- Poner normas y límites: Ejemplo: las cosas las diremos una sola vez y si no haces caso las consecuencias serán “éstas” (según sea el caso y la edad le llevarán a su cuarto para que recapacite, no le prestarán atención, cambiamos ese comportamiento por otro más adecuado, etc) Por ejemplo, cuando el pequeño se enfada y pega a otros niños: le diremos claramente “no se pega” y le ofreceremos otra alternativa, para que sepa lo que tiene que hacer “si estas enfadado por algo se lo dices a tu amiguito, le dices lo que quieres o te gustaría”.
- Imponer «castigos» si no obedecen
- No perder la calma, ni entrar en sus provocaciones
- Reforzar el buen comportamiento: Es importante señalarles lo que hacen bien, decirles lo contentos que estamos cuando han obedecido y prestarles atención.
- Darle cariño y comprensión: Hay que comprender la edad y etapa por la que pasan los niños, ser conscientes de que están formando su identidad.